COP29: resultado decepcionante para las personas más afectadas por el cambio climático
El tema central de las conversaciones sobre el clima ha sido la financiación pública
"Los países del norte global deberían estar avergonzados. Han olvidado el verdadero alcance de su deuda climática. Las consecuencias del cambio climático y el aumento del hambre en el mundo están costando innumerables vidas. El objetivo financiero ignora cínicamente estas necesidades. En su lugar, se debe dar una prioridad clara a la financiación pública adicional que sea accesible para las comunidades que alimentan al planeta, pero que tendrán que soportar la peor parte del cambio climático", argumenta Marie Cosquer, analista de incidencia sobre los sistemas alimentarios y clima en Acción contra el Hambre.
La decisión ignora el vínculo entre los efectos del cambio climático y otras crisis. Especialmente en los países que ya se ven gravemente afectados por el conflicto y la pobreza, la crisis climática aumenta el riesgo de hambre y desnutrición. El acceso a los fondos de mitigación y adaptación al cambio climático es particularmente urgente en Estados frágiles y afectados por conflictos, donde hay un alto nivel de inseguridad alimentaria y desnutrición. Sin embargo, los países más expuestos a las perturbaciones relacionadas con el clima no están recibiendo los recursos que necesitan para prepararse para estas perturbaciones y mitigarlas. Como ha demostrado el Informe Mundial de Asistencia Humanitaria 2023, la financiación climática multilateral per cápita en países vulnerables al clima con crisis duraderas es solo una quinta parte de los fondos proporcionados en países vulnerables al clima sin crisis a largo plazo (1 USD frente a 4,88 USD). La conferencia mundial sobre el clima no ha logrado marcar el rumbo de la financiación climática para beneficiar directamente a las personas más afectadas.
Alimentación y agricultura
En el ámbito de la alimentación y la agricultura, la COP29 no ha conseguido cumplir ningún nuevo compromiso vinculante para una transformación socialmente justa y sostenible de los sistemas alimentarios que sitúe en el centro a los pequeños agricultores y el derecho a una alimentación adecuada. La recién lanzada Iniciativa Climática Harmoniya para agricultores se centra en la contribución de los agricultores a la mitigación y adaptación al cambio climático, pero no incluye pasos ni compromisos concretos.
Sin embargo, en los casos en que faltaban medidas concretas en materia de alimentación y agricultura, los grupos de presión corporativos han salido a la calle: cientos de representantes de la industria agrícola han asistido a la COP29. Estas oportunidades de influencia y greenwashing por parte de las empresas, por ejemplo, en eventos paralelos y pabellones, significan que las empresas que producen los insumos siguen obteniendo beneficios y que los pequeños agricultores dependen de este sistema. Mientras las voces de las comunidades más afectadas no se escuchen lo suficiente en las negociaciones sobre el clima, no se producirá una transformación real tan necesaria.
En la COP29, Acción contra el Hambre ha representado los intereses de las comunidades más afectadas del Sur Global y ha abogado por la adopción de medidas sostenibles para un mundo sin hambre. El creciente número de fenómenos meteorológicos extremos relacionados con el clima, como sequías, inundaciones y olas de calor, amenaza la seguridad alimentaria de millones de personas y afecta especialmente a las mujeres, niños y niñas. En la actualidad, 733 millones de personas padecen hambre.
